Seguramente más de una vez te haya pasado que al pintar tus uñas se hayan rozado con algo y el esmaltado se arañe porque no se han secado lo suficiente, o simplemente no te las pintas porque no dispones de tiempo suficiente para esperar a que se sequen por completo.
Desde Arte Manchego te lo ponemos más fácil con este consejo:
Empezamos llenando un cuenco con agua fría. Si la del grifo no está lo suficientemente fría, puedes añadir cubitos de hielo. Pinta tus uñas como haces normalmente e introduce tus dedos en el cuenco con el agua durante dos o tres minutos. Deja que se sequen al aire. ¡Verás cómo se acelera el proceso de secado!
Si por el contrario quieres que se el esmalte se quite mejor, mete los dedos en agua caliente. Hará que el pintauñas se ablande.